En La Fuente del Pinar, en el paraje de Yecla se dice que todas las noches aparece un fantasma. Esta es su historia:
Dicen que hace muchos años vivió en la mansión de el paraje una joven de nombre Eduvigis. se contaba que era muy bella y muy amable y que poseía una gran fortuna. parece ser que un pastor se enamoró de ella y se fue a vivir con ella a la mansión.
por desgracia, Eduvigis cogió la lepra, horrorizada por su aspecto no quería que nadie la viese, pero como le encantaba salir a pasear por el campo se ponía un vestido largo hasta los pies, unos guantes largos que le cubrían los brazos y una gasa que le tapaba la cara, además salía a la calle con un quitasol. Todo ello blanco.
Al pastor no le importó la enfermedad de Eduvigis, pero finalmente la abandonó, ella murió de la pena.
Poco después se encontró al pastor atravesado en el campo.
La vieja mansión fue habilitada hace poco como albergue y cuentan que todas las noches, si te asomas a la ventana podrás ver una figura femenina, cubierta por un vestido blanco hasta los pies, unos guantes también blancos, una gasa que le cubre la cara y un quitasol también blanco.
